La mini bomba SKS AIRFLEX ahora facilita aún más el inflado. El secreto está oculto debajo de la práctica tapa antipolvo: en la tubería de la bomba hay una manguera que se puede extraer y atornillar en el cabezal de la válvula para las válvulas SV de forma hermética. La manguera flexible ofrece suficiente alcance cuando se bombea hasta 8 bar. Esto no solo protege la válvula, sino también los músculos del brazo. El asa del componente blando y el agarre frontal empotrado aseguran un buen agarre. La combinación de materiales de aluminio y componentes de plástico y carbono con relieve SKS hace que la bomba liviana sea imprescindible para los ciclistas conscientes del diseño.